El presidente de la República, José Raúl Mulino, acompañado de su esposa, Maricel Cohen de Mulino; ministros y viceministros de Estado, entre otras autoridades gubernamentales, participó en los actos cívicos realizados en el distrito de Boquete, provincia de Chiriquí, en el marco de la celebración de los 204 años de la Independencia de Panamá de España, ocurrida el 28 de noviembre de 1821.
En su mensaje, el presidente Mulino agradeció a los panameños "por hacer patria todos los días, con su esfuerzo, dedicación y con un amor incondicional al país". Luego, hizo un repaso de la importancia de diversos sectores, destacando a: los trabajadores que mueven el país, los artistas que mantienen viva nuestra identidad, las fuerzas de seguridad, maestros, estudiantes, los profesionales de la salud y otras ramas, así como los campesinos e indígenas que producen y cosechan nuestra tierra.
Los actos protocolares se llevaron a cabo en el Palacio Municipal José Domingo Candanedo. Allí, se entregó el pabellón nacional al ministro Juan Carlos Orillac, abanderado oficial de este 28 de noviembre.
La ceremonia también fue el marco para que el mandatario Mulino hiciera un repaso de los hechos históricos que antecedieron al pueblo panameño para lograr la independencia. Estos sucesos, apuntó el Presidente, escribieron la historia de la formación de una patria soberana y de un territorio independiente como el que hoy conocemos.
El mandatario también mencionó las acciones emprendidas por su gobierno para retomar una buena política exterior. Entre los temas que destacó figuran: el avance en la interconexión eléctrica, la integración con el Mercosur y la Alianza Centroamericana, el fortalecimiento de lazos con la Unión Europea, Japón y Corea del Sur, y el buen momento en las relaciones con los Estados Unidos, tras superar divergencias pasadas.
“Todo lo que hice, y seguiré haciendo en materia internacional, es con la finalidad de devolverle a Panamá el respeto internacional, la confianza de los inversores, y la apertura del país para que más personas de negocios y turistas vengan aquí”, sostuvo Mulino.
Fueron decisiones duras, pero necesarias y con sentido patrio, remarcó el Presidente, como: controlar la migración, implementar políticas para atraer inversiones concretas y sumar turistas. Finalmente, hizo hincapié en la necesidad de cerrar un buen año, ordenando las finanzas y, sobre todo, reactivando las obras paradas.
“Lo que le han hecho a Panamá roza la traición a la patria, dejando en el abandono hospitales, potabilizadoras, escuelas y caminos… Soy una persona que tiene defectos, pero nunca voy a atentar contra la patria que amo”, puntualizó.
El mandatario cerró su intervención con un mensaje al pueblo, al referirse a temas económicos. “Todos queríamos estar volando… con muchísimo esfuerzo estamos carreteando para poder despegar. Pero es el camino correcto. No se puede seguir tomando el camino fácil, el juega vivo populista, que nos ha llevado al borde del abismo”, concluyó.
Este es un camino que destaca datos macroeconómicos favorables y sienta las bases para empezar a mover la rueda de la economía, con mejoras palpables en la microeconomía que se traducirán en beneficios para los consumidores en las tiendas, los negocios, y la generación de nuevas oportunidades.
Posterior al acto protocolar, donde también tuvo participación el alcalde de Boquete, Eduardo Rodríguez, se inició el desfile cívico por la Avenida Central de Boquete, Más de 60 delegaciones, entre escuelas, instituciones y bandas independientes, marcharon y rindieron honor al país y cierran así los festejos por el Mes de la Patria.









